Deporte y salud oral

Aunque muchos de nosotros no lo sepamos, la salud oral y el deporte están relacionados en muchos sentidos. Principalmente en la aparición de caries. Los problemas bucales pueden afectar al rendimiento deportivo, y la práctica de deporte de forma intensa podría afectar a la salud bucal. Es por eso que hoy os contamos cuál es la relación principal entre el deporte y la salud oral y qué prácticas podrían causar efectos negativos como la caries dental.

Caries y deporte: ¿Por qué están relacionadas?

Por un lado, el incremento de la respiración bucal durante el deporte, el estrés asociado a la competición y la deshidratación producen una reducción de la saliva. Esto puede favorecer la aparición de caries. Por otro lado, el elevado consumo de carbohidratos y bebidas isotónicas, zumos envasados, batidos, favorece el desgaste del esmalte dental y la aparición de caries y sensibilidad dental.

¿Cómo podemos prevenir la caries si practicamos deporte?

Presta atención a la nutrición

Modera el consumo de azúcares, bebe abundante agua durante la práctica deportiva, y elige las bebidas energéticas con menor potencial cariogénico

Mantén una higiene bucal adecuada

Cepilla tus dientes al menos tres veces al día, utilizando hilo dental, cepillos interproximales…

No olvides realizar revisiones orales frecuentes

Es fundamental visitar a tu odontólogo e higienista con regularidad para controlar el desarrollo de nuestra salud oral.

Si tienes cualquier duda sobre cómo mantener una buena salud oral si practicas deporte, contacta con nosotros son ningún tipo de compromiso. Nos encontrarás en Carrer de Jaume Casanovas 45, el Prat de Llobregat.

Cuida tu salud oral este verano

Cuidar nuestra salud oral es fundamental en todas las épocas del año. Aun así, es común que en verano nos relajemos y nos olvidemos un poco más de nuestra rutina, dejando de lado la importancia de cuidar nuestros dientes.

Es por eso que hoy te contamos una serie de consejos para cuidar de tu dentadura este verano y evitar cualquier problema durante esta época y estas vacaciones.

Las vacaciones de verano son una época para relajarse y desconectar. Aun así, muchas veces esto conlleva cambios en la rutina y ciertos excesos que pueden llegar a ser perjudiciales para nuestra salud oral. Es por eso que hoy os contamos unos consejos que podéis llevar a cabo después de las vacaciones para asegurar que vuestra salud bucodental es la adecuada y evitar posibles problemas de cara a la vuelta a la rutina.

6 consejos para cuidar tu salud oral este verano

Bebe agua con regularidad

En verano perdemos más líquido debido a las altas temperaturas, por lo que es preciso tener siempre agua fresca a mano. Una buena hidratación previene infecciones e inflamaciones en la boca.

Establece una dieta sana, con alimentos de temporada.

La fruta y la verdura son excelentes para comidas ligeras y con alto contenido en agua. Disfruta de ensaladas, de frutas como el melón, la sandía o el melocotón… que serán de gran ayuda para mantenerte hidratado y mejorar tu salud bucodental.

No abuses de bebidas azucaradas ni alimentos con alto contenido en azúcar.

Durante esta época es muy común comer helados, granizados… Debemos tratar de establecer un límite y, por supuesto,  cepillar los dientes después de comerlos. Las bebidas azucaradas también hacen que el esmalte se oscurezca y que la caries aparezca de manera más rápida, igual que los helados.

No olvides tu rutina de higiene bucodental.

Cepilla tus dientes mínimo 3 veces al día y al menos durante 2 minutos para que la limpieza sea profunda. Usa hilo dental y enjuague para una mejor limpieza.

Controla la ingesta de alcohol y el consumo de tabaco.

El abuso de bebidas alcohólicas y el tabaco hacen que aparezcan con más frecuencia ciertas enfermedades bucodentales. Te animamos a apostar por un consumo responsable para que puedas disfrutar de tu verano sin ningún tipo de problema.

Protege tus labios del sol.

No debemos olvidarnos de que los labios también son importantes para nuestra higiene bucodental. Utiliza un cacao con protección para cuidarlos. La exposición solar es un factor de riesgo para desarrollar cáncer oral.

Asegúrate de que tu salud bucodental es la correcta tras el verano

Es el momento ideal para una revisión dental Para volver a la rutina de forma totalmente segura, acude a la clínica para una revisión. Así podremos comprobar el buen estado de tu salud oral o darte ciertas recomendaciones.

Vuelve a dedicar el tiempo que requiere tu rutina de higiene oral Recuerda cepillar tus dientes después de cada comida e incluye el hilo dental en tu rutina para hacerla más completa.

Cuida tu alimentación Es muy común durante las vacaciones el hecho de descuidar la alimentación. Te animamos a que vuelvas a incorporar alimentos como frutas y verduras a tus comidas para cuidar la sonrisa tras los posibles excesos.

No te olvides de la hidratación. Es muy importante mantenerse hidratado para estimular la salivación. La saliva tiene un papel esencial en la eliminación de bacterias y estimula el buen aliento.

Si tienes cualquier duda y deseas consultarnos, ponte en contacto con nosotros sin ningún tipo de compromiso, ¡estaremos encantados de ayudarte!

Gingivitis: causas y prevención

La gingivitis es una forma bastante frecuente y leve de enfermedad periodontal. Suele causar irritación, enrojecimiento e inflamación de la parte de las encías que rodea la base de los dientes. Es fundamental tomar la gingivitis en serio y tratarla rápidamente, ya que de lo contrario puede llevar a una enfermedad de las encías mucho más grave: la periodontitis.

Es por eso que hoy os contamos las principales causas de la gingivitis, los síntomas que indican esta patología y cómo podemos prevenirla de forma adecuada.

Causas principales de la gingivitis

La causa más común de la gingivitis es la mala higiene oral. Una higiene oral insuficiente estimula la formación de placa sobre los dientes, causando inflamación de los tejidos de las encías. La placa es una película invisible y pegajosa compuesta por bacterias que se forman sobre los dientes. Se requiere una eliminación diaria de la placa, ya que se vuelve a formar rápidamente. Si la placa que permanece en los dientes, puede endurecerse debajo de la línea de las encías, transformándose en sarro. Para eliminarlo, es necesaria una limpieza dental profesional. Los buenos hábitos de higiene bucal, como cepillarse los dientes mínimo dos veces al día, usar hilo dental y acudir a la clínica para realizar los controles dentales periódicos, pueden ayudar a evitar la gingivitis.

Prevención

Si quieres mantener tu boca sana y evitar esta enfermedad bucodental, es importante que tengas en cuenta los siguientes factores:
    • Cepíllate los dientes correctamente: la higiene bucal es un factor fundamental para la prevención de esta patología. Cepillar tus dientes de manera adecuada ayudará a evitar el desarrollo de la gingivitis.
    • Usa el hilo dental adecuadamente: el hilo dental es una herramienta que suele ayudar mucho en estos casos, ya que ayuda a eliminar los restos de alimentos y la placa bacteriana que se acumula entre los dientes. 
<liMantén una alimentación equilibrada: existen muchos alimentos que dañan nuestros dientes y también existen otros que los nutren. Por ello es importante que mantengas una dieta sana y equilibrada. <liVisítanos periódicamente: es importante que periódicamente reserves una cita para que podamos indicarte qué tipo de tratamiento necesitarás o para evitar que la patología se desarrolle más. Si tienes cualquier duda y quieres que te aconsejemos y ayudemos, ponte en contacto con nosotros sin ningún tipo de compromiso, ¡te esperamos!

Bruxismo: causas y tratamiento

¿Tu pareja te ha comentado que rechinas los dientes por la noche? ¿Te despiertas con dolor de cabeza, dental o mandibular? Si sospechas que tienes bruxismo sigue leyendo porque te contamos todo lo que necesitas saber. El bruxismo es una patología conocida comúnmente como la acción de rechinar de los dientes. Se puede producir durante el día o por la noche. El más frecuente es el relacionado con el sueño, y también el más difícil de controlar. Las personas que padecen bruxismo aprietan fuertemente los dientes superiores con los inferiores y los mueven de atrás y a adelante y viceversa, la mayoría de las veces de forma inconsciente. Esto produce el desgaste de las piezas. Hoy te contamos cuáles son las principales causas del bruxismo y cómo podemos tratarlo según tu situación.

¿Qué es el bruxismo?

El bruxismo es el hábito involuntario de apretar o rechinar los dientes, afectando tanto a adultos como a niños. Puede ocurrir de día o durante el sueño, y suele estar relacionado con el estrés, la ansiedad o problemas dentales.

Causas principales del bruxismo

Aunque cada caso en particular es distinto, actualmente, muchos especialistas  defendemos que una de las causas principales que originan el bruxismo apunta al estrés.

Aún así, además del estrés, existen otros factores que pueden contribuir a la aparición:

  • La alimentación
  • Los hábitos del sueño
  • La postura
  • La alineación de los dientes, especialmente si no es adecuada.
  • La incapacidad para relajarse.

El bruxismo es un trastorno multifactorial y sus principales causas incluyen:

  1. Factores psicológicos: el estrés y la ansiedad son los principales desencadenantes, tanto en el bruxismo diurno como nocturno.
  2. Factores físicos: problemas de alineación dental (maloclusión) y trastornos del sueño, como la apnea, pueden contribuir al bruxismo.
  3. Hábitos y estilo de vida: el consumo excesivo de cafeína, alcohol o tabaco puede agravar la condición, especialmente durante el sueño.

Estas causas vienen acompañadas de unos síntomas bastante claros, como el dolor de cabeza, la sensibilidad muscular, molestia e inflamación en la mandíbula o sensibilidad a las cosas calientes, frías y dulces.

 

Síntomas del bruxismo

El bruxismo puede manifestarse a través de una amplia variedad de síntomas, que no siempre son evidentes en las primeras etapas. Reconocerlos es fundamental para evitar complicaciones. 

1. Desgaste dental

El rechinamiento constante provoca un desgaste visible en los dientes. Esto puede reducir la altura de los dientes y afectar su funcionalidad y apariencia.

2. Dolor mandibular y muscular

Apretar excesivamente los dientes genera tensión en la mandíbula, lo que puede derivar en molestias constantes o episodios de dolor agudo. En casos severos, el dolor puede extenderse a cuello y hombros.

3. Sensibilidad dental

La exposición de las capas internas del diente debido al desgaste puede aumentar la sensibilidad al frío o calor, generando incomodidad al comer o beber.

4. Dolor de cabeza 

El bruxismo nocturno, en particular, está asociado con dolores de cabeza recurrentes, especialmente al despertar, debido a la tensión acumulada durante la noche.

5. Sonidos al rechinar los dientes

En el caso del bruxismo nocturno, el ruido producido al rechinar los dientes puede ser detectado por compañeros de habitación o familiares. Esto es una señal clara de bruxismo.

6. Limitación del movimiento mandibular

En algunos casos avanzados, las personas con bruxismo pueden experimentar dificultad para abrir completamente la boca o sentir un «clic» en la articulación temporomandibular (ATM) al masticar o hablar.

Tratamiento del bruxismo

El tratamiento del bruxismo tiene como objetivo aliviar los síntomas, prevenir el daño dental y abordar las causas subyacentes. Las estrategias varían según la severidad del caso y los factores asociados.

1. Férula de descarga

Las férulas o protectores bucales son dispositivos personalizados que se colocan en los dientes para crear una barrera que protege los dientes. Además ayuda a relajar la mandíbula al mantenerla en una posición más equilibrada durante el sueño.

Las férulas de descarga son una buena opción que suele emplearse para evitar el bruxismo mientras el paciente duerme. Este método ayuda a prevenir los daños en los dientes y los problemas en la articulación.

Aún así, aunque son muy utilizadas, estas férulas no resuelven el problema y, aunque eliminen el dolor, si se dejan de usar éste volverá a aparecer.

2. Terapias de relajación y manejo del estrés

Dado que el estrés y la ansiedad son desencadenantes comunes del bruxismo, las terapias psicológicas pueden ser de gran utilidad, incluyendo meditación, yoga, ejercicios de respiración, actividad física regular o terapia cognitivo-conductual.

3. Correcciones dentales

Si el bruxismo está relacionado con una mordida desequilibrada, el odontólogo puede proponer tratamientos como ortodoncia correctiva, restauraciones o ajustes oclusales para redistribuir las fuerzas masticatorias.

Las terapias aplicadas a tratar el bruxismo están orientadas a la reducción del dolor, la prevención del desgaste de las piezas dentales y la disminución del rechinamiento de los dientes.

Otras medidas que se pueden intentar son las siguientes:

  • Evitar los alimentos duros y los dulces.
  • Realizar ejercicios de relajación que ayuden a reducir el estrés.
  • Aplicar hielo o paños calientes en el área donde está localizado el dolor.
  • Masajear la zona afectada.
  • Dormir las horas recomendadas.
  • Beber mucha agua.

Como último recurso, podríamos optar por la cirugía pero esta será siempre nuestra última opción.

Prevención del bruxismo

Prevenir el bruxismo implica adoptar hábitos saludables y mantener el estrés bajo control: 
  • Evitar estimulantes: Limitar el consumo de cafeína, alcohol y tabaco, especialmente antes de dormir.
  • Promover la relajación: Practicar técnicas como meditación o yoga para reducir la tensión diaria.
  • Cuidado dental regular: Visitar al dentista periódicamente para detectar signos tempranos de bruxismo.
  • Hábitos saludables: Mantener una rutina de sueño adecuada y evitar masticar objetos duros como bolígrafos.

Clínica Dental Casaus, especialistas en bruxismo en el Prat del Llobregat

Si tienes cualquier duda,  ponte en contacto con nosotros sin ningún tipo de compromiso, ¡Te esperamos!

Salud Oral Infantil: consejos

La salud oral infantil es fundamental, ya que si les inculcamos desde bien pequeños que tener una boca en condiciones es muy importante para su salud, si adoptan desde ya hábitos de higiene y cuidado diarios, conseguiremos que los mantengan durante toda la vida Es por eso que hoy os contamos 4 consejos básicos para mantener una buena salud oral en los más pequeños.

4 consejos para la salud oral infantil

Cepillarse los dientes al levantarse, después de comer y antes de ir a la cama

A veces los niños se saltan el cepillado de la noche porque tienen mucho sueño, pero es el más importante, pues las bacterias que se alojan en la boca actúan especialmente por la noche. Es esencial que se vayan a la cama con los dientes limpios.

Evitar alimentos con exceso de azúcares

Como chuches, helados, caramelos, refrescos azucarados, zumos envasados, etc… Además de estar asociados a la obesidad infantil, el azúcar presente en estos alimentos deteriora el esmalte, erosionándolo y favoreciendo la aparición de caries. Es importante evitar o reducir su consumo a ocasiones especiales y enseñarles a cepillarse siempre los dientes después de consumir estos alimentos.

Ayudarles con el cepillado

Muchas veces confiamos en su buen hacer y luego nos llevamos sorpresas desagradables. A partir de los 7 u 8 años los niños son capaces de cepillarse los dientes correctamente, limpiando todas sus caras, mientras tanto habrá que ayudarles para llegar a donde ellos no llegan, especialmente muelas y caras internas de los dientes.

Utilizar pasta de dientes y colutorios específicos para niños

¿Por qué es importante que no utilicen los productos de los mayores? Porque para los pequeños vienen dosis específicas de flúor adecuadas a su edad, que no perjudican su salud.

Recuerda que si tienes cualquier duda, contacta con nosotros y te ayudaremos y aconsejaremos sin ningún tipo de compromiso.

Salud dental en la tercera edad

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Sea cuál sea nuestra edad, es muy importante cuidar nuestra salud dental ya que ésta tiene consecuencias directas en nuestro bienestar y nuestro estado de salud general. Todas las etapas de la vida tienen sus particularidades y, en todas ellas, se deben tomar ciertas precauciones. Pero a medida que envejecemos, debemos tomar conciencia de cuidar nuestra salud bucodental. De esta forma, podremos disfrutar de una buena calidad de vida el máximo tiempo posible.

¿Cómo puede afectar la edad en la salud dental?

Debido al envejecimiento y al desgaste por el paso del tiempo, en la tercera edad es posible, y habitual, que la salud bucodental sufra alteraciones. El uso de prótesis, los efectos de ciertas medicaciones o trastornos normales de salud pueden afectar negativamente a la salud de dientes y encías.
  • Aparición de caries: la caries, sobre todo la radicular (en la raíz de los dientes), suele ser la más común en las personas mayores. Por eso es importante extremar la higiene bucodental para evitar la aparición de esta caries tan devastadora.
  • Sensibilidad dental: la sensibilidad dental también suele aparecer, o incluso agravarse, en la tercera edad, ya que las encías se retraen con el tiempo y quedan al descubierto zonas que no están protegidas por el esmalte, particularmente sensibles al dolor.
  • Sequedad bucal: la sequedad de la boca también es un trastorno bastante habitual muchas veces debido al consumo de determinados medicamentos. Para combatirla, es recomendable ingerir muchos líquidos, sobre todo agua. Y aquellas personas que usan dentaduras postizas deben extremar sus hábitos de higiene bucodental para mantener la dentadura limpia y ajustada y evitar la aparición de manchas, el mal aliento o inflamación de las encías.
Si tienes dudas sobre tu salud bucal o crees que deberías visitarnos, ven a vernos sin ningún tipo de compromiso. Podrás encontrarnos en Carrer de Jaume Casanovas 45, el Prat de Llobregat.

Diabetes y salud bucodental

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Cuando hablamos de la diabetes, muchas veces nos olvidamos de sus efectos en la boca, ya que la cavidad oral de los diabéticos tiene más riesgo de desarrollar patologías en las encías o los dientes, incluso con pérdida de piezas dentales. Es por eso que hoy te contamos qué trastornos bucodentales van ligados a la diabetes y te decimos cómo prevenirlos.

En las personas diabéticas, los dientes y las encías son una parte del cuerpo que suele sufrir especialmente los efectos de la enfermedad. Por lo tanto, un buen cuidado y una buena higiene bucodental es aún más fundamental en las personas diabéticas. Existe una relación clara, directa y recíproca entre la diabetes y las enfermedades de las encías. No solo los diabéticos tienen más riesgo de sufrir una enfermedad periodontal  (3 o 4 veces más que el resto), sino que la presencia de trastornos en las encías pueden identificar precozmente el desarrollo futuro de esta enfermedad.

¿Cómo afecta la diabetes a la salud dental?

Una persona diabética, si no se trata adecuadamente, tiene una mayor susceptibilidad a las infecciones, boca seca, halitosis y retraso en la cicatrización de las heridas, entre otros problemas bucales.

Sufrir una infección en las encías, como la gingivitis o la periodontitis, también puede afectar a los niveles de azúcar en sangre. Por eso, tener unos hábitos de higiene dental correctos puede ayudar a mantener una buena salud bucodental y a controlar la diabetes.

Las enfermedades periodontales son más frecuentes y suelen estar más avanzadas en diabéticos. Una buena higiene oral será fundamental para estos pacientes. La periodontitis puede ser un primer signo de diabetes y, si no se controla, puede hacer que empeore. Por otro lado, un buen tratamiento de las enfermedades de las encías puede mejorar el control de la diabetes.

Problemas bucodentales que más afectan a las personas diabéticas

Periodontitis

Muchos estudios apuntan que las personas con diabetes tienen mayor probabilidad de sufrir trastornos en las encías, generalmente debido a que son más susceptibles a desarrollar infecciones bacterianas y tienen menos capacidad para combatirlas. Es por eso que es común que las personas con diabetes sufran gingivitis (la enfermedad de las encías en su etapa inicial, caracterizada por inflamación y sangrado debido a la acumulación de placa bacteriana) o enfermedad periodontal (en una fase más avanzada, cuando el trastorno evoluciona a pérdida de hueso alrededor de los dientes). Además del daño que provoca esta patología en las encías y el hueso que sujeta los dientes, la periodontitis podría dificultar el control de la glucosa en la sangre, es decir, esta afección podría contribuir al avance de la diabetes.

Pérdida de dientes

El mayor riesgo de sufrir trastornos en las encías es que puede desencadenar en la pérdida de piezas dentales. Se estima que uno de cada cinco casos de pérdida de dientes está vinculado con la diabetes, según datos de la Asociación Dental Americana.

Sequedad bucal

Es muy común que la diabetes vaya ligada también a la sequedad en la boca. La falta o disminución de la saliva es un problema importante, porque este líquido que en condiciones normales se segrega durante las 24 horas del día, tiene funciones importantes, como lubricar los labios y la mucosa bucal, eliminar restos de comida…. favoreciendo la higiene bucodental. La diabetes puede también alterar la composición de la saliva, elevando sus niveles de glucosa.

¿Cómo se pueden controlar los trastornos orales?

Aunque hay ciertos signos que pueden advertir la presencia de problemas en la boca, como el sangrado de encías, las encías rojas, hinchadas y sensibles, el mal aliento…, lo mejor siempre es prevenir la aparición de cualquier trastorno de la siguiente manera:

  • Controlar el nivel de glucosa en la sangre.
  • Cepillarse los dientes y usar seda dental a diario, contando también con la ayuda de los cepillos interdentales.
  • Acudir con regularidad al dentista, indicándole siempre que tienen diabetes.
  • Dejar de fumar, puesto que el tabaco afecta de manera muy negativa a las encías.
  • Inspeccionarse periódicamente la boca y ante el menor indicio de cualquier problema, ir al especialista.
  • En el caso de usar dentaduras postizas o prótesis, hay que sacarlas y limpiarlas a diario. También se debe comprobar que se ajusten bien, sin provocar roces o heridas.

¿Por qué debes acudir al dentista?

En nuestra clínica, podemos contribuir al diagnóstico precoz de la diabetes y, con los cuidados necesarios, ayudar a que control de la enfermedad sea más efectivo. Es importante acudir al dentista si se detectan síntomas como encías enrojecidas, inflamadas, sensibles o que sangran con facilidad.

Si tienes cualquier duda sobre cómo puede afectar la diabetes a tu salud oral, no dudes en ponerte en contacto con nosotros. Nos encontrarás en Carrer de Jaume Casanovas 45, el Prat de Llobregat.

Sensibilidad dental; causas y tratamiento

¿Alguna vez has sentido molestia al comer algo frío, o algo muy caliente? Probablemente esta molestia haya sido causada por tener los dientes sensibles, de modo que las temperaturas extremas, frío o calor, te generan una sensación muy próxima al dolor. Hoy te contamos a qué se debe esta molestia tan extraña en tus dientes, y te ayudamos a saber cómo proteger tus dientes y evitar sufrir esta sensación día a día.

La sensibilidad dental es un dolor intenso, de corta duración, en respuesta al frío, al calor o incluso al tacto en los dientes y las encías. Con la llegada del calor, la sensibilidad dental suele ser una patología que aparece de forma más habitual. Comenzamos a consumir alimentos y bebidas frías, que pueden provocar dolores cortos y agudos. Es por eso que hoy os contamos unos cuantos consejos para saber cómo podemos combatirla de la forma adecuada.

¿Por qué tengo los dientes sensibles?

En general, los dientes están protegidos por un esmalte que los defiende ante cambios bruscos de temperatura en los alimentos que ingerimos. Gracias al esmalte, no llegamos a percibir a penas estas sensaciones.

Por tanto, si tenemos una alta sensibilidad dental se deberá a que el esmalte que protege nuestros dientes está deteriorado.

¿Por qué se deteriora el esmalte de los dientes?

Este deterioro suele producirse casi siempre por una mala higiene bucal que hace que aparezca sarro o caries que se encargan de eliminar el esmalte protector de nuestros dientes.

Sin embargo, el esmalte también puede haber desaparecido como consecuencia de un golpe que haya provocado la rotura de un diente y, por tanto, una vía de acceso a través del esmalte de los alimentos y bebidas.

¿Cómo puedo proteger y recuperar el esmalte de mis dientes?

La clave está, como casi siempre, en la higiene bucal. Debes de esforzarte en fortalecer tus rutinas de higiene bucal. Aparte del cepillado habitual después de cada comida, asegúrate de utilizar hilo dental para los espacios entre los dientes y no acabar nunca tu rutina sin la utilización de un enjuague bucal.

Por otro lado, si ya tienes una sensibilidad dental alta, es recomendable que utilices una pasta dental específica para dientes sensibles. Estas pastas dentales ayudan a la recuperación del esmalte de los dientes, con lo que potencian la protección de éstos ante los cambios de temperatura.

Consejos para tratar la sensibilidad dental

1.Reducir el consumo de ácidos

Para hacer frente a este dolor, es fundamental reducir el consumo de alimentos ácidos. Este tipo de alimentos, como los cítricos, el picante… pueden desgastar el esmalte de los dientes. Si los consumes, lávate los dientes inmediatamente después para tener una limpieza efectiva y una boca sana durante más tiempo.

2.Reducir el consumo de dulces y bebidas azucaradas

Es muy importante reducir el consumo de dulces o bebidas azucaradas. Estos productos favorecen la proliferación de bacterias, deteriorando las encías y dejando expuestas áreas sensibles de los dientes. Esto aumenta la posibilidad de tener problemas dentales en un futuro.

3. Evitar cepillar demasiado fuerte los dientes 

Si eres propenso a padecer sensibilidad, un cepillado demasiado fuerte puede desgastar tu esmalte y producirte irritaciones. Existen cepillos especiales que no son tan fuertes y cuyos filamentos son más suaves con los dientes y encías.

4. Evitar bebidas y comidas a temperaturas muy altas o muy frías

Las bebidas y comidas a temperatura muy alta o frías aumentan las posibilidades de padecer hipersensibilidad.

Si tienes cualquier duda sobre la sensibilidad dental y crees que necesitas visitarnos, no dudes en contactar con nosotros. Nos encontrarás en Carrer de Jaume Casanovas 45, el Prat de Llobregat.

Sarro en los dientes: ¿cómo evitarlo y combatirlo?

Muchas personas conviven día a día con el sarro en sus dientes sin actuar ante esta situación, o creen que con cepillar los dientes con frecuencia, el sarro no aparecerá en su dentadura. Debemos saber que siempre vuelve a aparecer y que su presencia puede advertir sobre el riesgo de otros problemas más allá de los bucodentales.

¿Qué es el sarro?

El sarro es el producto de la mineralización de la placa bacteriana. Se compone de una mezcla de saliva, restos de comida… y las colonias de bacterias que se alimentan de ellos. Suele ser el responsable de la caries y la enfermedad periodontal,  dos de los problemas bucodentales más frecuentes entre la población y evitables en la gran mayoría de los casos, si sigue una correcta higiene y un mínimo de revisiones en clínica.

¿Cómo podemos eliminarlo?

Aunque las acumulaciones de sarro suelen producirse por una higiene oral insuficiente, una vez formadas no pueden eliminarse tan solo con un cepillo dental corriente ni con ningún otro tratamiento que el paciente pueda practicar en casa. Para quitar el sarro, el paciente debe dirigirse a una clínica odontológica y realizarse una higiene bucodental, ya que es el único método para eliminarlo. Las limpiezas bucodentales son tratamientos completamente indoloros y que no desgastan el esmalte de los dientes. Se recomienda hacerse una o dos limpiezas al año, especialmente a aquellos pacientes con más propensión a sufrir caries o enfermedad periodontal, como mujeres embarazadas o personas con diabetes u otras enfermedades sistémicas.

¿Podemos prevenirlo?

Para evitar la aparición de sarro, una correcta higiene bucodental y una serie de revisiones y limpiezas bucodentales periódicas son suficientes para contenerlo. De todas formas, si no nos cepillamos de forma correcta, la placa no tardará en acumularse y formar sarro.  Además, el uso de colutorios bucales (enjuagues con sustancias que eliminan las bacterias de nuestra boca) también ayudarán a prevenir su formación. Te recomendamos acudir a Clínica Dental Dra. Casaus para que podamos revistar tu higiene bucodental y prevenir la aparición de placa o cualquier otro problema. Nos encontrarás en Carrer de Jaume Casanovas, 45, El Prat de Llobregat.

Cómo tratar la halitosis

En Clínica Dental Dra. Casaus, tenemos en cuenta problemas que van más allá de mejorar tu sonrisa. Tratamos situaciones que se convierten en una verdadera preocupación social para quién los sufre. Eso es lo que sucede con la halitosis, el nombre que recibe el mal olor bucal, sufrido por muchas personas en algún momento de su vida.

¿Qué es la halitosis?

La halitosis no es una enfermedad en sí misma, pero sí que puede ser uno de los síntomas de otras patologías bucodentales, estomacales o incluso relacionadas con otros sistemas de nuestro cuerpo. La mayoría de personas que sufren halitosis, lo hacen de forma pasajera. Pueden acabar con el mal olor mediante buenos hábitos higiénicos o tras haberse curado de la patología en cuestión. Aún así, existen algunos casos crónicos en que la halitosis se convierte realmente en un problema importante para el paciente, comprometiendo sus relaciones sociales y sus relaciones íntimas.

¿Por qué aparece?

Normalmente, se establece una división en las causas de la halitosis:

1. Higiene bucodental inadecuada:

En este caso,  el mal olor suele estar provocado por la descomposición bacteriana de los alimentos. Esto se debe a una limpieza insuficiente de nuestros dientes (uso inadecuado o poco frecuente del cepillo dental, falta de uso de enjuague bucal, hilo dental y cepillos interdentales…) Por lo tanto, la solución de este problema también favorecerá la salud bucodental general.

2. Patologías internas o externas a la cavidad oral:

Por otra parte, las enfermedades como las caries, la periodontitis, la xerostomía u otras infecciones de la boca pueden aumentar el mal olor. Por este motivo, es muy importante asistir al dentista si notamos molestia en alguna parte de nuestra boca. De esta manera, además de tratarla, también podremos prevenir un mal olor bucal.

En nuestra clínica, nos encargamos de hacer un diagnóstico para detectar de dónde proviene el problema de la halitosis y actuar en consecuencia. Si sufres este problema, visítanos de inmediato para que podamos ayudarte. Nos encontrarás en Jaume Casanovas 45, El Prat de Llobregat.